¿Qué es un Acuerdo Extrajudicial de Pago?

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La Ley de la Segunda Oportunidad, que se rige bajo la Ley 16/2022, de 5 de septiembre, es una legislación que ofrece una solución legal para personas y empresas que experimentan problemas financieros y buscan reorganizar sus deudas de manera efectiva. En este contexto, el Acuerdo Extrajudicial de Pago se presenta como una herramienta crucial. A lo largo de este artículo, examinaremos en profundidad qué implica un Acuerdo Extrajudicial de Pago y cómo opera en la práctica.

                         

¿Qué permite el Acuerdo Extrajudicial de Pago?

El Acuerdo Extrajudicial de Pago, contemplado en la Ley dela Segunda Oportunidad, es un recurso legal que permite tanto a individuos como a empresas establecer un acuerdo con sus acreedores para reorganizar sus deudas sin recurrir a los tribunales. La finalidad de este acuerdo es evitar la insolvencia y la posterior liquidación de los activos del deudor, proporcionando una solución beneficiosa para todas las partes involucradas.

Este proceso se basa en la honestidad y en la negociación entre el deudor y sus acreedores. El deudor presenta a los acreedores un plan de pagos que se adapta a sus recursos financieros, con el propósito de saldarlas deudas de manera realista y sostenible en un plazo específico. Para que el acuerdo sea válido, al menos el 60% de los acreedores deben aprobarlo. La meta es evitar que los acreedores recurran a procedimientos judiciales para recuperar las deudas.

Procedimiento para iniciar el proceso

El procedimiento comienza con la presentación de una solicitud por parte del deudor ante el juzgado competente. Esta solicitud debe ir acompañada de un detallado plan de pagos que incluya una justificación sólida. El plan debe exponer con claridad la situación financiera del deudor, detallando sus ingresos, gastos y la propuesta de pago a los acreedores.

Tras la presentación de la solicitud, el juzgado designará aún mediador concursal cuya tarea principal será facilitar las negociaciones entre el deudor y sus acreedores. El mediador concursal actuará como un intermediario imparcial, buscando llegar a un acuerdo que sea factible y beneficioso para todas las partes involucradas.

Durante el proceso de negociación, se llevarán a cabo reuniones en las que se discutirán las propuestas de pago, se evaluarán las perspectivas de recuperación de los acreedores y se buscará alcanzar un consenso. Si se obtiene la aprobación del acuerdo por parte de al menos el 60% de los acreedores, el acuerdo se someterá a la homologación judicial, lo que le otorgará validez y permitirá su cumplimiento forzoso.

Beneficios de este mecanismo legal

El Acuerdo Extrajudicial de Pago brinda una serie de beneficios tanto a los deudores como a los acreedores, lo que lo convierte en un procedimiento atractivo para ambas partes:

  1. Evita la declaración de insolvencia: Al llegar a un acuerdo extrajudicial, el deudor evita la declaración de insolvencia, lo que significa que no se liquidarán sus activos. Esto preserva su patrimonio y le ofrece la oportunidad de reorganizar sus finanzas sin perder sus bienes.
  2. Plan de pagos realista: Este mecanismo permite al deudor proponer un plan de pagos que sea factible según su situación financiera real. Esto implica plazos y condiciones de pago flexibles, lo que facilita el cumplimiento de sus obligaciones.
  3. Beneficio para los acreedores: Aunque los acreedores pueden recibir un monto menor que la deuda total, este enfoque ofrece una alternativa más favorable en comparación con la declaración de insolvencia. Los acreedores tienen la posibilidad de recuperar al menos parte de sus créditos sin incurrir en costos y retrasos asociados a procedimientos judiciales prolongados.

En resumen, el Acuerdo Extrajudicial de Pago es una herramienta valiosa en la Ley de la Segunda Oportunidad, ya que busca equilibrar los intereses de los deudores y los acreedores. Facilita la reestructuración de las deudas y evita la insolvencia, lo que proporciona apersonas y empresas en dificultades financieras una segunda oportunidad para recuperarse. Basado en la buena fe y la negociación, este acuerdo allana el camino hacia la estabilidad financiera y la superación de desafíos económicos. Es fundamental contar con abogados especializados en la Ley de la Segunda Oportunidad para llevar a cabo este proceso de manera efectiva.

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